
El 75% de las personas no reconocen plenamente sus fortalezas cerebrales naturales. Según la neurociencia, las personas son más efectivas y valoradas cuando operan desde sus habilidades innatas. La evaluación de tipo de pensamiento BTSA, desarrollada por la Organización Benziger, es una herramienta basada en la neurociencia y diseñada para identificar y potenciar las preferencias naturales del cerebro, permitiéndote vivir una vida más saludable y plena
Benziger Thinking Styles Assessment
TEST BTSA
Con este autoconocimiento, te relacionarás con el entorno de manera más efectiva y desde una perspectiva renovada, guiándote en el camino del fluir, estado natural de tu ser.
El Modelo Benziger es una herramienta líder en la comprensión del comportamiento humano.
Con más de 27 años de experiencia y fundamentado en los estudios del Dr. Carl Gustav Jung, el Modelo Benziger ha abordado diversas necesidades, desde el ámbito personal hasta el desarrollo y fortalecimiento de equipos humanos.
El test BTSA es uno de los instrumentos más avanzados en la evaluación neuropsicológica de los estilos de pensamiento individuales. Esta herramienta desvela no solo las fortalezas y debilidades innatas de una persona.
Además, es esencial para la gestión del talento, basándose en un análisis profundo y detallado de la información que recabamos sobre cada individuo.
Modos de pensamiento
Frontal Izquierdo: Evalúa todas las variables.
Toma de decisiones lógicas, negocia, debate y asignar prioridades.
Basal Izquierdo: Monitoreo y controla.
Pone atención a los detalles, procedimientos rutinarios. Planificaciones y mantiene procesos administrativos.
Frontal Derecho: Imagina y crea. Es solucionador de problemas. Arriesgar, innova, mira el futuro.
Basal Derecho: Armoniza y apoya. Celebrar, alienta, calma y establece pertenencias
En un mundo lleno de información constante y rápidas dinámicas, entender el funcionamiento de nuestro cerebro nos brinda una ventana única hacia la comprensión de nuestros pensamientos, acciones y emociones diarias.
Al operar desde nuestra preferencia cerebral natural, todo fluye con mayor armonía. Identificar y actuar desde esta dominancia cerebral nos permite no solo conocernos mejor, sino también diseñar estrategias para optimizar nuestra calidad de vida.
Actuar desde nuestro lado cerebral preferido nos lleva a realizar actividades con mayor entusiasmo y concentración, fusionando acción y emoción.
Esta forma de actuar nos da el control, hace que nuestras acciones se sientan gratificantes por sí mismas y reduce el gasto energético a su mínima expresión.
Por el contrario, cuando una actividad nos resulta tediosa y nos agota, es probable que estemos operando desde una zona cerebral no preferente, incrementando así nuestro consumo energético y, potencialmente, afectando nuestra salud física y emocional
